Annie Leonard es la autora de una serie de cortos que nos hacen reflexionar acerca del origen y ciclo de vida de los productos, su proyecto se titula "The Story of Stuff" (La Historia de los Objetos) su más reciente trabajo se titula "The Story of Cosmetics"(La Historia de los Cosméticos), vale mucho la pena verlo, tiene una duración de 8 min. aproximadamente.
Nuestro consumo podría sufrir algunas transformaciones después de ello, ya que nos habla acerca de las sustancias dañinas contenidas en los productos de cuidado personal, desde shampoos especializados, hasta jabones de bebé. Creo que después de verlos todas cumpliremos con nuestra obligación como buenas consumidoras: Conocer de verdad los productos que consumimos, buscar y exigir información.
Bueno en mis múltiples indagaciones en la web para brindarles información útil para su hogar, me he topado con esta página www.consumoresponsable.org; Altamente les recomiendo visitarla ya que cuenta con diversos artículos a cerca de un consumo responsable no sólo orientado a amas de casa sino a cualquier persona en general que esté interesado en mantener un equilibrio en el medio ambiente. En uno de sus apartados tuve la oportunidad de leer algunos tips para saber qué hacer con estos artículos de limpieza que son tan dañinos para el medio ambiente: detergentes, refrigerantes, desinfectantes, desatascadores, limpiadores de vajillas, hornos, cristales, pisos entre otros.
Las Recomendaciones son las siguientes (Las que aplican a México ya que al parecer es española la fuente):
Antes de comprar deberíamos preguntarnos: ¿realmente lo necesito?
Usar siempre la mínima cantidad de producto. Controlar las cantidades de todos los productos que se utilizan reduce entre un 10% y un 20% su uso.
Lee atentamente la etiqueta.
Nunca debemos mezclar productos (cloro y amoníaco, cloro y desinfectante WC, etc.), pues podemos correr riesgos de intoxicación.
Usar detergentes sin fosfatos.
Recuerda que los detergentes deben ser obligatoriamente en un 90% biodegradable. No obstante, ese margen del 10% sigue siendo perjudicial para el medio ambiente. Se pueden buscar otras alternativas, como productos naturales.
No utilices aerosoles que por lo general afectan a la capa de ozono.
Adquiere productos con envases reciclables.
Recuerda "No es más limpio quien más limpia, sino quien menos ensucia". Es más eco-lógico limpiar la casa regularmente que utilizar todos estos productos tan fuertes, que afectan a nuestra salud y contaminan el medio ambiente.
Utiliza recetas naturales menos agresivas y tóxicas. Con agua, vinagre y jabón suave se limpia perfectamente toda la casa. Si la suciedad está incrustada o necesitamos rascar, podemos utilizar zumo de limón, bicarbonato o bórax.
Utiliza productos de limpieza ecológicos.
Recuerda que en el mercado puedes encontrar trapos, detergentes y bolsas de basura (por ejemplo) que son reciclables y con los cuales no se daña el medio ambiente en los procesos de fabricación de los mismos. De este modo, reducirás la demanda de productos agresivos y aumentarás la demanda de productos ecológicos, forzando así a las empresas a prestar más atención a la ecología en sus productos.
Utiliza bolsas de basura de plástico reciclado o bolsas desechables fabricadas con almidón de maíz en vez de plástico.
En nuestro país, todos los productos alimenticios empacados deben brindar información acerca del producto, es lo que conocemos como “Información Nutrimental”, esta nos ayuda a verificar fácilmente aquellos productos que son convenientes en nuestra dieta, además de poder compararlos para identificar la opción más saludable.
Esta etiqueta puede lucir complicada, pero en realidad es fácil de leer. Algo que podemos hacer es identificar los puntos más importantes de ella para así enfocarnos en lo que nos interesa saber.
Abajo, tenemos una muestra de una etiqueta común la cual se ha separado por secciones, cada una nos brinda diferente información:
1. Raciones
El tamaño de ración es la cantidad de alimento recomendada para su consumo en una comida, esta es estándar y el cálculo de cada nutriente de la lista (sección 3) está basado en esa cantidad.
Las raciones por envase, nos indican cuántas raciones contiene el envase.
2. Calorías
En esta sección se menciona el contenido calórico del producto. Como sabemos las calorías son una unidad de energía, que nuestro cuerpo requiere para realizar nuestras actividades diarias. Provienen de los carbohidratos, proteínas y grasas.
La etiqueta resalta la cantidad de energía que proviene de la grasa, este tipo de calorías se ha asociado con enfermedades cardíacas y otras complicaciones de salud, es por eso que debemos buscar alimentos que tengan un bajo contenido en calorías de la grasa.
3. Cantidad por porción
Los nutrientes más importantes son enlistados en este apartado, se muestra la cantidad en gramos y el porcentaje de ingesta diaria recomendada que contiene el producto, es decir, nos dice qué tanto cubrimos las necesidades de nuestro cuerpo con ese alimento. Podemos decir que un alimento es nutritivo, cuando tiene cerca del 20% de valores recomendados, en alguno de los nutrientes.
Los elementos que nos importan más son: la fibra dietética, que nos ayuda a mantener una buena digestión; y las grasas saturadas y el colesterol, que deben evitarse por su efecto negativo en el sistema circulatorio.
4. Vitaminas
Al igual que en la sección anterior, se señalan los porcentajes diarios recomendados que cubre el producto. Con esto podemos identificar si nuestra familia consume las vitaminas y minerales indispensables para un buen rendimiento, de lo contrario, podemos buscar alternativas naturales que complementen su alimentación.
5. Valores Diarios Recomendados
Estos nos hablan de la cantidad de nutrientes que nuestro cuerpo necesita diariamente, sin embargo, cada una de nosotras tenemos requerimientos distintos. Esos valores se basan en una dieta de 2,000 Kcal, esta cantidad es mayor a la que consumen muchas mujeres, por ello debemos ajustar nuestros requerimientos diarios haciendo una sencilla regla de tres: si un alimento cubre el 5% de las necesidades diarias de fibra (en una dieta de 2,000 Kcal), éste cubriría el 7% de las necesidades de alguien que consume 1,500 calorías diarias.
Lo más importante es conocer los nutrientes que nos brinda un producto, para poder compararlo o complementarlo con otros productos. Debemos aprender a ser críticas, para así tomar mejores decisiones al momento de hacer las compras, nuestra familia será beneficiada con una alimentación más sana y nosotras tendremos más conciencia de lo que estamos consumiendo.
Algunos de los productos que se encuentran en la casa como limpiadores, pinturas, productos de limpieza personal, o limpieza de alfombra son tóxicos y perjudican al medio ambiente.
Estos productos crean desperdicios tóxicos que después contaminarán al medio ambiente. Otros de ellos afectan al ser respirados o absorbidos por la piel, llegando a causar problemas en el hígado, riñones, sistema respiratorio, otros llegan a causar cáncer.
Como amas de casa debemos actuar, la solución está en nuestras manos. Es importante tener en cuenta lo siguiente:
Educarnos y estar atentas.
Usar limpiadores orgánicos biodegradables y no tóxico.
Leer las etiquetas de los productos que compramos y buscar ingredientes tóxicos.
Estar alerta de los combustión venosa tales como amoniaco/ cloro.
¡Juntas podemos hacer un cambio en nuestra casa y contribuir con nuestro mundo para crear una cultura verde!